viernes, 3 de mayo de 2013

El puente de las brujas.

En un puente a orillas de la carretera que cruza una raquítica quebrada uno pensaría que nunca podría pasar nada interesante. Pero todo empieza a cambiar cuando uno se entera que lo apodan "el puente de las brujas", y luego uno se pregunta por qué, pero no encuentra de dónde sacar la historia del nombre.
Luego recuerda que en una ocasión, uno fue parte de un ritual de año nuevo, en el que uno era el único representante masculino en una madrugada de algún primero de Enero. Y que luego tres brujas se quedaron solas en contacto con su desnudez y la piel de la tierra. Y luego imagina que tal vez, y sólo tal vez, la brujería rompe el tiempo, y el nombre del puente se lo dieron porque mucho tiempo después de haber sido creado, iba a ser centro de un aquelarre.